Coloquio 'Pasado, presente y futuro de la mujer en la profesión farmacéutica'

El jueves, 7 de marzo, el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Las Palmas ha organizado en su sede un coloquio conmemorativo del Día Internacional de la Mujer “Pasado, presente y futuro de la mujer en la profesión farmacéutica”, que será moderado por la vicepresidenta del Colegio, Inmaculada Tenorio Hernández, y que contará con la participación de Inmaculada Alarcón Torres, farmacéutica de Análisis Clínicos; de Sara Rubio Sánchez, farmacéutica de Docencia e Investigación; Marina Martín Torres, farmacéutica de Atención Primaria; y Margarita Aneyros Santamaría, farmacéutica titular de Farmacia Comunitaria.

El coloquio comenzará a las 18.00 horas y para adelantar el debate Inmaculada Alarcón, Sara Rubio, Margarita Aneyros y Marina Martín Torres han respondido a las siguientes preguntas:

Inmaculada Alarcón Torres

¿Qué significa desde un punto de vista personal y profesional el Día Internacional de la Mujer?

Inmaculada Alarcón Torres IAT.- Yo creo que es un día para recordar y tener presente cada año, que las mujeres deben de tener las mismas oportunidades que los hombres en la vida tanto personal como profesional y demostrar que se tienen las mismas capacidades sin sesgo de género.

Considero que nosotras, como farmacéuticas, somos mujeres privilegiadas en este sentido porque hemos podido acceder a estudiar una carrera universitaria y acceder a un puesto de trabajo que nos ha dado una libertad de movimiento y de pensamiento que no han tenido otras mujeres, al no tener las mismas posibilidades y no poder acceder a la formación y al trabajo.

Aunque la conciliación familiar no está resuelta, era y sigue siendo difícil todavía compaginar la vida familiar con la laboral. Por ello, creo que se debería incentivar o ayudar más a las mujeres en los años de crianza de los hijos, no solo la baja por maternidad, ya que la maternidad es una de las razones que más dificultan el desarrollo profesional a las mujeres. En el periodo de la baja maternal y durante los primeros años de crianza de los hijos, no hay productividad científica, ni la misma disponibilidad, y eso merma los CV y las posibilidades de empleo o de mejora en el empleo. En la empresa privada, a día de hoy, todavía sigue habiendo discriminación de las mujeres por motivo de las cargas familiares, como son los hijos. Las empresas no quieren mujeres “con mochila” por las consecuencias que ello conlleva.

El lema que se ha elegido para el Día Internacional de la Mujer 2019, es “Pensemos en igualdad, construyamos con inteligencia, innovemos para el cambio”. Yo creo que con inteligencia se puede conseguir esta igualdad de posibilidades y cambiar las cosas.

 

¿Cómo ha evolucionado tu situación profesional en el pasado, en el presente y qué esperas del futuro?

IAT.- En mi situación profesional no puedo decir que haya tenido ningún problema por el hecho de ser mujer. Me he podido desarrollar profesionalmente y ejercer mi carrera sin más problemas que los habituales que pudieran tener también los hombres.

Mi padre tenía muy claro que debíamos estudiar y formarnos, siempre insistía en que debíamos ser independientes tener nuestros estudios y nuestro trabajo. Mi madre ya fue una mujer trabajadora en su farmacia y tuve la suerte de poder acceder a mis estudios gracias a que en mi familia me pudieron permitir salir a estudiar. Pude acceder a una plaza en el hospital por oposición y en el presente, no puedo decir que haya sido discriminada en mi trabajo por ser mujer ya que he podido acceder a una plaza de jefatura de Sección que actualmente desempeño.

En el futuro, como ya me queda muy poco para la jubilación, espero que las mujeres puedan seguir desarrollándose como realmente ellas deseen sin condicionamientos de ningún tipo.

 

¿Por qué crees que hay pocas mujeres en puestos directivos en nuestra profesión cuando un 70 por ciento de nuestras colegiadas son mujeres?

IAT.- Yo solo puedo hablar del mundo del hospital que es el que conozco en primera persona y no creo que haya discriminación de las mujeres ya que en muchos servicios hay más mujeres que hombres y un número importante de cargos directivos han sido y son mujeres. En el hospital, no creo que haya discriminación en los puestos directivos por ser mujer, pues ha habido y ahora mismo, hay un número importante de mujeres directivas, jefes de Sección, de Servicio, subdirectoras, directoras e incluso la Gerente de mi hospital durante muchos años fue una mujer.

En el mundo del laboratorio, en HUGCDN tenemos en el Servicio de Hematología, una Jefa de Servicio y una Jefa de Sección. Lo mismo que en el Servicio de Microbiología, que la jefa es Ana Bordes que es farmacéutica, y en el Servicio de Análisis Clínicos, donde la Jefa de Servicio y la Jefa de Sección somos mujeres. También la subdirectora de laboratorios es una mujer y muchos otros Servicios están o han estado dirigidos por mujeres como Nefrología, Neurología, Radioterapia, Medicina Interna, etc.… y el mismo Servicio de Farmacia Hospitalaria, en la actualidad. Otros laboratorios de hospitales de Canarias, también están dirigidos por mujeres, como son el laboratorio del CHUIMI, en que la jefa del Servicio es Marta Riaño, farmacéutica. En el CHUC, la Jefa de Servicio es una mujer, médico, y en el hospital de Fuerteventura, la Jefa de Servicio actual fue directora del hospital y el laboratorio del HUNSC también está dirigido por una mujer. Los dos servicios de laboratorio de La Palma y Lanzarote están dirigidos por dos compañeros farmacéuticos. Por ello, no creo que en mi medio del laboratorio clínico haya esta discriminación por ser mujer.

Sara Rubio Sánchez

¿Qué significa desde un punto de vista personal y profesional el Día Internacional de la Mujer?

Sara Rubio Sánchez SRS.- Desde mi punto de vista es un día de celebración. El 8 de marzo se conmemora el día en el que la mujer consiguió poder acceder a los Estudios Superiores en igualdad de oportunidades que los hombres.

A partir de ese 8 de marzo de 1910 se inicia un nuevo modelo de mujer profesional e independiente. Una mujer que busca un desarrollo personal y profesional más allá del cuidado de los niños y del hogar. Una mujer que tiene inquietudes, sueños y que está dispuesta a lograrlos aun cuando las barreras con las que se encuentre sean grandes.

Es un día para recordar a todas aquellas mujeres que, gracias a su lucha por sus ideales, nos han permitido llegar hasta donde hoy estamos, sin olvidarnos que todavía queda mucho por avanzar. En ese sentido, del fin no alcanzado, también es una fiesta reivindicativa de igualdad.

El objetivo es conseguir respeto, igualdad y equilibrio en cuanto a la presencia de mujeres y hombres en los distintos ámbitos de actuación y niveles de responsabilidad en la sociedad.

 

¿Cómo ha evolucionado tu situación profesional en el pasado, en el presente y qué esperas del futuro?

SRS.- Mi andadura profesional comenzó inmediatamente después de licenciarme. Durante seis años ejercí como profesional de Oficina de Farmacia (Farmacéutica adjunta), donde aprendí y desarrollé todas las actividades que se llevan a cabo en una botica; si tuviera que destacar algo fueron los conocimientos de formulación magistral adquiridos, dado que caí en manos de un farmacéutico galénico de los de antes. Por cuestiones personales me trasladé a Gran Canaria. Entonces, se hizo tangible la posibilidad de ingresar en la Universidad y seguir formándome en otros campos. Me incorporé como colaboradora en el 2003 al Departamento de Bioquímica y Biología molecular, Fisiología, Genética e Inmunología y comencé mi andadura científica. Desde entonces pertenezco al grupo de investigación “Bioquímica farmacológica” de la ULPGC. Me doctoré en ciencias Clínicas - Clínica y Terapéutica- en 2009. El amor por la ciencia, la inquietud de adquirir nuevos conocimientos y la posibilidad de compartir mis conocimientos hicieron que pasara a formar parte de la plantilla de la universidad. Desde hace cinco años soy docente de Fisiología en la sede de Fuerteventura en el Grado de Enfermería. El objetivo es conseguir plaza de contratado en la universidad (hoy en día casi todos los profesores contratados por la universidad se están haciendo bajo la denominación de asociados a tiempo parcial) para continuar disfrutando de la transmisión de conocimientos a las nuevas generaciones inculcando valores como el respeto, colaboración, integración, tolerancia e igualdad de oportunidades, así como seguir aportando mi granito de arena a la ciencia.

Mi situación profesional ha pasado por diferentes etapas en la que se han evidenciado todas las desigualdades que pueden aparecer a la mujer a nivel profesional: desde los inicios, donde se percibía que alumnos de género masculino tenían mejores salidas profesionales, en las mismas condiciones de expedientes académicos, que la mujer. Durante la época de maternidad en la que el cuidado de los niños hace reducir la jornada laboral o incluso renunciar al trabajo por el cuidado de los mismos, a expensas de un retraso en la carrera profesional. Así como en los procesos de selección y promoción del personal científico y docente, en los que se evidencia una selección a favor del género masculino. Objetivo conseguir equidad para ambos géneros en todos los aspectos sociales.

 

¿Por qué crees que hay pocas mujeres en puestos directivos en nuestra profesión cuando un 70 por ciento de nuestras colegiadas son mujeres?

SRS.- A pesar de que son muchos los logros alcanzados todavía existe el denominado “techo de cristal” que impide a la mujer alcanzar cargos importantes. El techo de cristal son formas y prácticas no explícitas difíciles de detectar. Los factores a los que podría atribuir esta discriminación son: por un lado, los comités que toman las decisiones de contratar nuevo personal o de ordenar la promoción personal suelen estar, en su mayoría, formados por hombres, por lo que inconscientemente, buscan rodearse de “semejantes”. La mujer sigue estando considerada por el hombre como muy emocional, menos luchadora y con menor capacidad de tener espíritu de iniciativa, y no la ven como una opción de estilo directivo diferente, con distintos modos de ver y evaluar la realidad, que podrían hacer posibles nuevas formas de organización del trabajo. Por otra parte, la mujer opta menos a los cargos de liderazgo, bien por el temor de no poder cumplirlo lo suficientemente bien o no poderse implicar todo lo que quisiera con la empresa por el hecho de tener otras ocupaciones (como el cuidado del hogar o el cuidado de niños), o bien por la inseguridad, errónea, de considerar que no tienen suficientes méritos para el cargo. La llamada carga cultural, no se ha aliviado completamente: Antes de la aprobación de la Constitución de 1978, la legislación vigente establecía la dependencia absoluta de la mujer hacia el hombre. No es hasta 1981, cuando se equiparará jurídicamente al marido y a la mujer en el matrimonio. Estos ejemplos, son muestra de lo reciente de los logros.

Margarita Aneyros Santamaría

¿Qué significa desde un punto de vista personal y profesional el Día Internacional de la mujer?

Margarita Aneyros Santamaría MAS.- En mi opinión , si las sufragistas levantaran la cabeza y vieran que hoy en día las mujeres requieren un Día Internacional de la Mujer, pensarían que en su momento no fueron suficientemente claras y contundentes en sus reivindicaciones. Viviendo en Europa no tiene ningún significado, pues siempre he trabajado y nunca he tenido problemas en mi carrera profesional, por ser mujer.

Quizás en otros países o en otras profesiones es un tema a tratar. Creo que tantos días internacionales o nacionales de tal o cual asunto resulta tedioso y cansino. Cada día es “el día de algo”… y excluyente para otras visiones y sensibilidades.., escucho el día del Cáncer de Mama muchas veces repetido, pero existen otros tipos de cáncer que no se les nombra, creo que con un día sería suficiente. Para mi es puro marketing.

 

¿Cómo ha evolucionado tu situación profesional en el pasado, presente y que esperas del futuro?

MAS. -Mi situación profesional ha empeorado muchísimo por culpa de las exigencias y normativas que esgrimen las diferentes administraciones sanitarias, fiscales y gremiales. Llevo en mi farmacia 41 años y me sentía más realizada los primeros años que ahora. Siento que me he convertido en una secretaria, altamente cualificada y resolutiva, de la Administración, con una retribución inexistente…, a coste cero.

Tenemos una gran carga burocrática, que nos encorseta y nos impide realizar nuestra labor sanitaria con tranquilidad y solvencia. Estamos más pendientes de no incumplir la norma que de escuchar proactivamente a nuestros pacientes y hacer una atención farmacéutica digna y ejemplar. Las millonarias sanciones nos acechan permanentemente, ya sean de corte sanitario o fiscal…es absolutamente desproporcionado el acoso que sufrimos, en contraposición a la labor social que desempeñamos. Con temor, no se trabaja con solvencia….estamos perdiendo parte de nuestra razón de ser y aportación a la sociedad por los reglamentos sancionadores.

Por supuesto que nos ayudamos de buenos profesionales, en mi caso somos cinco farmacéuticos, pero al final siempre recae sobre los titulares /propietarios, toda la responsabilidad y a veces me siento un policía de sus actuaciones, un “controller” de los protocolos…y eso no es gratificante ni agradable…

Al disponer de una oficina de farmacia en una zona turística, resolvemos muchísimos problemas en el mostrador sobre pequeñas patologías, incluso algunos médicos nos llaman para preguntarnos el nombre del medicamento en España, pues el paciente les da el nombre comercial de su medicación y nosotros gracias a los recursos bibliográficos (Martindale), informáticos (Bot Plus…,Vademecum ) y nuestros conocimientos, facilitamos el trabajo a nuestros compañeros facultativos prescriptores.

Del futuro, solo espero más complicaciones, pues hasta ahora no veo nada que nos proporcione más facilidad a la hora de realizar nuestro trabajo; más controles, más normativas, más posibles y suculentas recaudatorias sanciones…

 

¿Por qué crees que hay tan pocas mujeres en puestos directivos en nuestra profesión cuando un 70% de nuestras colegiadas son mujeres?

MAS.- Creo que la sociedad aun no está estructurada para que la mujer ocupe esos puestos de dirección. La mujer en sus decisiones va más al grano y no pierde el tiempo; concretamos más , resolvemos con más eficacia y efectividad. Los hombres parecen que tienen todo el tiempo del mundo y su familia pasa a segundo o tercer plano.

La sociedad quiere que la mujer tenga hijos pero no pone los medios, para que esa mujer pueda dedicarse al cien por cien como un hombre a su trabajo. Para ello la Administración debería de otorgar largos periodos de baja, de varios años, hasta que el niño vaya a la guardería y además las guarderías deberían tener pediatras y psicólogos en sus centros para que no te llamen por cualquier cosa. Ya que la mujer, si es madre, seguirá ocupándose de sus hijos y de su familia prioritariamente. Es por eso por lo que creo que a muchas mujeres no les compensa el trabajo de dirección.

Pero la mujer que quiere y vale, en nuestra sociedad puede y llega a puestos de dirección, pero casi siempre a costa de dejar otras cosas; la mujer que alcanza puestos de dirección, ha pagado un altísimo precio y esa factura, siempre es de mayor importe que la que un hombre pagaría.

La clase directiva nuestra es más política que otra cosa y a muchas mujeres no les interesa.

Margarita Martín Torres

Qué significa desde un punto de vista personal y profesional el Día Internacional de la Mujer?

Margarita Martín Torres MMT.-  Para mí, tanto a nivel personal como profesional, no significa mucho este día, entiendo que es importante reivindicar la igualdad laboral de las mujeres y que, aunque se ha avanzado bastante, todavía queda mucho por mejorar, pero yo nunca me he sentido discriminada respecto a los hombres en ninguno de los trabajos que he tenido. Igual ese es el motivo de que no sea un día importante para mí.

 

¿Cómo ha evolucionado tu situación profesional en el pasado, en el presente y qué esperas del futuro?

MMT.-Empecé trabajando en una farmacia comunitaria en la que estuve casi siete años y muy bien, aunque después de tantos años me apetecía un cambio y surgió la oportunidad de irme a un Centro de Atención a las Drogodependencias en el Ayuntamiento de Santa Lucía. Allí trabajaba en el Servicio de Farmacia básicamente preparando y dispensando metadona y haciendo analítica de control de drogas, un trabajo cómodo pero poco clínico que es lo que me gusta. Estando en el CAD, hice un breve paréntesis, porque me llamaron de Educación para dar clase en FP, me había apuntado a las listas cuando terminé la carrera. Solo estuve dos meses y  medio, justo para darme cuenta de que la enseñanza no era lo mío. Volví al CAD y ahí estuve hasta octubre de 2007, año en el que empecé a trabajar en mi puesto actual como Farmacéutica de Atención Primaria. El futuro no espero que sea muy distinto del presente ya que saqué la plaza en la OPE de 2007 y puedo seguir aquí hasta que me jubile, pero no me cierro a futuros cambios.

 

¿Por qué crees que hay pocas mujeres en puestos directivos en nuestra profesión cuando un 70 por ciento de nuestras colegiadas son mujeres?

MMT.- En mi ámbito laboral yo no veo diferencias. Mi jefa directa es una mujer, la anterior gerente era mujer, en los Centros de Salud la mayoría de las directoras son mujeres... Pero la realidad es que en otros colectivos, los directivos son mayoritariamente hombres y no encuentro explicación, de todas formas esto va cambiando aunque sea poco a poco.